sábado, 31 de octubre de 2009

Empieza la aventura nipona

Ya estoy en Kyoto! Finalmente conseguí la beca para estudiar cómo trabajan en las universidades japonesas. Ya que son conocidos por tener un nivel de servicio realmente bueno, la idea es documentar sus procedimientos, organización, etc. De paso, cómo no!, es hacer un poco de turismo, poner en práctica el japonés que he ido aprendiendo, etc. Vamos que no me aburriré!

El día no ha empezado bien: he cogido el tren para ir al aeropuerto y me ha tocado ir de pie desde Granollers hasta Sants. Desde luego no me extraña que la gente no quiera usar el transporte público!

Es la primera vez que usaba la Terminal 1 del Prat y me ha sorprendido que el paseito en autobús desde la estación sea tan largo. La nueva terminal tiene otra pinta y compite perfectamente con las de otras ciudades europeas.

El avión me deparaba una pequeña sorpresa: me encuentro rodeado de niños (con sus madres) y me plantan una cuna delante de mi. Ole! Me he pasado el rato cogiendo juguetes, reparando la cuna y ayudando a la madre que tenía al lado porque no daba a basto (la niña era hiperativa o lo parecía). Al final se ha dormido la condenada y hemos podido descansar. Para el billete de vuelta tengo el mismo asiento cogido pero lo voy a cambiar en cuanto tenga un minuto!

En cuando he llegado al aeropuerto de Kansai (con el mismo ritual que en USA pero sin quitarme los zapatos) he cambiado el dinero y he comprado el billete de tren para Kyoto (3100 Yenes!). Cuando he llegado a mi destino he cangeado uno de los Japan Rail Pass (que se activará dentro de unos días) y he comprado un bonotransporte para el bus y así me despreocupo todo el mes (9250 Yenes, el transporte no es barato).

He preguntado dónde se cogía el autobús número 4 y he podido llegar sin problemas. Comento estos pequeños detalles porque todo lo que he hablado ha sido en japonés y me hace especial ilusión! Vale... son cosas sencillas, pero al menos tengo ese recurso!

Al llegar al apartamento he subido al último piso (sin ascensor, mi espalda lo ha notado), me he llevado la grata sorpresa de que parece más grande que en las fotos. Tiene todo lo que necesito (menos plancha, pero bueno, tampoco sé usarla...). La conexión a Internet es especialmente buena aunque es por cable.

Como tenía hambre (eran las 13:30 cuando he llegado) me he ido a un pequeño restaurante de ramen (sólo sirven eso) y por 700 Yenes he comido la mar de bien ("cervesita" incluída). El ramen es una sopa muy similar al cocido donde le ponen fideos finos, algo de carne, cebolla y poco más. Muy bueno! No he hecho foto, pero como repetiré ya la pondré. :)

Luego me he ido a un konbini (tienda 24h, como el 7/11) y he comprado cosas básicas (agua, desayuno, champu, ...). Para ir a un supermercado grande tengo que coger el autobús pero no me apetecía nada. Los konbinis son un poco más caros, pero para las 4 cosas que llevaba no merecía la pena.

Luego he echado una siesta, que se ha alargado más de lo que pensaba, maldito jet lag. Y me he ido a dar una vuelta y cenar. He cogido el bus número 4 hasta Kawamarachi con Sanjo donde hay un montón de sitios para comer y beber. He cenado un restaurante de sushi con cinta situado en la calle principal. Calidad a buen precio! :) Cuando he venido las otras 2 veces también he comido aqui.

En las calles hay mucho ambiente. Además es halloween y se ve gente disfrazada.

De vuelta a casa temprano, me he comprado una fanta de uva (!) y he visto que justo al lado del apartamento puedo jugarme la vida comiendo fubu.

jueves, 15 de octubre de 2009

Oktoberfest y birras

En uno de los comentarios alguien me puso que el blog parecía una review de cervezas o algo así... Aunque no estoy muy de acuerdo, no es menos cierto que es un tema que me interesa.
Es por ello que conforme vaya probando ciertas cervezas pondré las notas de cata, sin pretensiones, soy un mero aficionado... pero que al menos me sirva para recordar si una cerveza me gustó o no y para qué momento puede ser adecuada.
Tengo la ventaja de que prácticamente cada semana podré dedicar un par de horas a este menester, con transporte incluido, en la meca cervecera catalana: El Drunk Monk de Mataró.

Esta semana es un poco especial porque lo tienen dedicado a la Oktoberfest, la famosa fiesta de la cerveza alemana. Eso significa que se dejan de servir cervezas belgas para dejar sitio a las del país teutón... Y la verdad, las rubias pierden por goleada. Supongo que los alemanes beben mucho, pero parece que no le dan mucha importancia a la calidad. Espero que las belgas vuelvan pronto!

En próximas "reviews" incluso pondré los nombres de los productos consumidos! :)